Normalmente se les toma como sinónimos, pero los profesores y los educadores tienen grandes diferencias entre ellos. Un profesor da un curso y luego se va a casa. Un educador da un paso más allá, y se preocupa por la formación personal de sus estudiantes. Un maestro ha sobrepasado ambas descripciones. No solo da su curso y se preocupa por sus alumnos, se compromete con ellos porque entiende que la mejor manera de asegurarnos un mundo mejor es teniendo mejores habitantes en las próximas generaciones.
Educar es una responsabilidad social muy importante y no puede ser tomada a la ligera. Es un don extraordinario; es la experiencia inolvidable de ser partícipe activo en el desarrollo integral de un ser. Ser llamado educador es una bendición pero también una gran responsabilidad que requiere tiempo, esfuerzo y paciencia.
Un profesor es capaz de enseñar, sin embargo, un educador va más allá:
* Un profesor te prepara para el viaje exterior; un educador te prepara para el viaje interior
* Un profesor se hará responsable de tu crecimiento; un educador te hace a tí responsable de tu crecimiento
* Un profesor te envía al camino del éxito; un educador te envía al camino de la libertad
